Friday, January 13, 2012

Los Retos Del Nuevo Año

En este Nuevo año tendremos muchos, y tal vez, más desafíos que durante este año que está por finalizar.

En EEUU la mayoría de la gente hace un compromiso al comienzo de un nuevo año. Es una resolución para el nuevo año. Por ejemplo:

Dejar de fumar.

Dejar de beber.

Leer mi Biblia todos los días.

Ir a la iglesia cada semana.

Pasar más tiempo con mi familia.

Perder peso.

Dejar de llegar tarde al trabajo.

Cuando comienza el nuevo año, están ilusionados de tomar el reto. A la mayoría de la gente les gusta un reto, pero no les agrada cuando tienen que trabajar duro por un largo tiempo. Por ejemplo, es fácil ayudar por un día pero no es tan fácil ayudar por una semana o un mes.

Jos 1:2-9 Mi siervo Moisés ha muerto; ahora pues, levántate, cruza este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel. 3 Todo lugar que pise la planta de vuestro pie os he dado, tal como dije a Moisés. 4 Desde el desierto y este Líbano hasta el gran río, el río Eufrates, toda la tierra de los hititas hasta el mar Grande que está hacia la puesta del sol, será vuestro territorio. 5 Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida. Así como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré ni te abandonaré. 6 Sé fuerte y valiente, porque tú darás a este pueblo posesión de la tierra que juré a sus padres que les daría. 7 Solamente sé fuerte y muy valiente; cuídate de cumplir toda la ley que Moisés mi siervo te mandó; no te desvíes de ella ni a la derecha ni a la izquierda, para que tengas éxito dondequiera que vayas. 8 Este libro de la ley no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y noche, para que cuides de hacer todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino y tendrás éxito. 9 ¿No te lo he ordenado yo? ¡Sé fuerte y valiente! No temas ni te acobardes, porque el SEÑOR tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.

“Mi siervo Moisés ha muerto”

Era un tiempo de gran cambio para Israel, la gente de Dios. Estaban enfrentando muchos cambios y era una aventura estimulante. Algunos de ellos probablemente se emocionaron, algunos estaban nerviosos, algunos estaban ansiosos, y algunos tenían miedo.

Este es un decisivo cambio para las iglesias del Perú. Pero con el nuevo año vienen desafíos.

Los desafíos que enfrentan ustedes son los mismos que enfrentaron los Israelitas.

Desafío numero uno:

1. El reto de liderazgo

La escritura que leímos nos mostró un cambio de liderazgo de Moisés a Josué. Siempre hay un reto de liderazgo. No importa quién es el líder, siempre hay un desafío que los lideres aceptamos y asumimos. La gente de Israel tuvo que tomar una decisión. Ellos podrían haberse quejado de Josué como líder o ellos podrían haberlo aceptado. Estoy seguro que algunos de ellos se quejaron.

El reto para ustedes es ver si ustedes pueden trabajar con sus líderes y realizar el trabajo de la iglesia. ¿O va usted a quejarse sobre los líderes y no les ayudará? Algunas personas aun hacen lo imposible para que los lideres no tengan éxito. No es un desafío si el líder es alguien que quieres, pero si el líder es alguien que no le gusta, entonces es un gran desafió.

¿Cumplirán ustedes el desafío de liderazgo?

El desafío número dos

2. El reto de cruzar

Era el tiempo para Israel a cruzar el Rio Jordán. Eso significaba que ellos no podían regresar. Significaba que ellos tenían que poner su corazón entero en el trabajo de conquistar la tierra. Después de que ellos cruzaron el Jordán, ellos sabían que estaban comprometidos a terminar el trabajo de conquistar la tierra. El problema era que casi nadie tenía experiencia cruzando el agua. Tendrían que depender de Dios para hacer algo.

Los israelitas habían cruzado el Mar Rojo cuando salieron de Egipto, pero una generación entera tuvo que morir excepto Caleb y Josué. Dios hizo un trabajo maravilloso en el pasado, ninguno de ellos lo vieron pero algunos lo recordaban. Ellos necesitaron cruzar de la duda y entrar a una postura de confianza en Dios. Necesitaron confiar que Dios podría hacer algo maravilloso nuevamente.

Hubo un tiempo de renacimiento en Perú. Era un tiempo en lo cual Dios hizo milagros y un gran trabajo aquí y tal vez algunos de ustedes lo recuerdan. ¿Pero qué hay del resto de ustedes? ¿Realmente quieren que Dios se mueva con poder nuevamente o ustedes solamente lo están diciendo, esperando en sus propias fuerzas y no en el poder de Dios? ¿Creen ustedes que El pueda hacerlo este año?

¿Asumirán el reto de cruzar la línea de la duda a la confianza este año?

El desafío numero tres

3. El reto de la conquista

Cuando Israel entró a la tierra prometida, ellos se encontraron con enemigos poderosos. Los enemigos tenían fortalezas, torres fuertes, muros altos y muchas armas. Ellos eran expertos en batallas. Ellos eran enormes y fuertes, y tenían una presencia aterradora.

Ellos estuvieron luchando para mantener su territorio.

Ustedes tienen algunos enemigos que conquistar este año venidero. El enemigo ha construido fortalezas en su vida y dentro de la iglesia este año que está por terminar. El no cederá terreno que ya ha tomado. El luchará en contra de ustedes para mantener este terreno conquistado.

No se cual es el terreno que el enemigo ha tomado de tu vida, pero tú sabes cuál es.

¿El odio ha entrado a tu corazón?

¿La lujuria se acentuó en tu mente?

¿Te has alejado del estudio y la oración?

¿Has hablado mentiras en contra de tus hermanos?

¿Has acusado injustamente?

¿Has dejado de dar tus diezmos y ofrendas?

¿El enemigo ha ganado terreno dentro de la iglesia?

Necesitamos vencer a nuestro enemigo este año. Debemos entender que nuestro único enemigo es el diablo. Si no vencemos a nuestro enemigo, nosotros nunca poseeremos todo lo que Dios tiene para nosotros. Tan solo viviremos en la tierra, con el enemigo robándonos todo el tiempo y causándonos problemas por siempre. Dios nos ayudará a vencer a nuestro enemigo.

¿Asumirás el reto de reconquistar el terreno tomado por el enemigo este año?

El desafío numero cuarto.

4. El reto del autocontrol.

Cuando llegó el tiempo para Israel de ingresar a la tierra prometida, ellos no llevaban una vida disciplinada. Ellos eran vagabundos y envidiosos. También, pensaban que todo lo que ellos deseaban, Dios se los iba a dar, sin tener que hacer nada.

En el desierto ellos recibieron alimento, el maná, de Dios sin hacer nada. Pero ahora Dios no iba darles el maná, por nada. El maná se acabó cuando ellos cruzaron el Río Jordán. Ahora debían trabajar para alimentarse. Debían disciplinar sus vidas. Debían de trabajar y luchar todos juntos para ser exitosos y conquistar a sus enemigos.

Para ser un soldado necesitamos ser disciplinados.

Un soldado no puede estar sentado todo el tiempo sin hacer nada.

El debe aprender a usar sus armas.

El debe ser disciplinado.

El debe obedecer las órdenes de su comandante, siempre.

Y no debe dejar que su comandante lo escuche quejándose.

Somos soldados en el ejército de Dios. Así que debemos mantener el control de nuestras vidas. Tener control de tu vida significa tener algo de disciplina. Debemos tener disciplina en nuestra vida. Si somos soldados, necesitamos hacer lo que quiere nuestro comandante. ¿Puedes imaginar un ejército donde cada soldado hace solo lo que quiere?

¿Asumirás el reto de autocontrol y tendras mas disciplina en tu vida?

5. El quinto reto que tienen ustedes es el reto de terminar su trabajo

Dios le mandó a Israel a conquistar la tierra, Él les dijo aniquilar totalmente sus enemigos en la tierra prometida. Pero ellos no terminaron el trabajo. Solo hicieron lo suficiente para obtener su tierra. Cuando ellos creyeron haber derrotado el enemigo totalmente, ellos dejaron de luchar porque ellos podían vivir cómodamente en sus ciudades. Tal vez ellos estaban cansados de luchar o tal vez estaban perezosos. Se rindieron y dijeron, “Esto es suficiente.” Pero era mucho menos de lo que Dios quería que ellos tengan.

Algunos de nosotros estamos como los Israelitas. No terminamos lo que desea Dios. Nos hemos detenido a la mitad del camino. No hemos terminado nuestro trabajo tampoco. Hemos sido salvados pero no poseemos todo lo que Dios tiene para nosotros. Probablemente es porque estamos muy flojos para estudiar Su palabra o permitimos que otras cosas sean más importantes que Dios. Por ejemplo, hemos tenido más de cien estudiantes en el instituto bíblico pero vamos a tener menos de doce graduados este año.

¿Recuerden ustedes lo que yo dije sobre las propósitos para el nuevo año en el principio del mensaje? La triste verdad es que la mayoría de la gente que se propone una meta no las cumple. Los cristianos que dicen, “Este año voy a pelear una buena batalla” o “Voy a orar y leer mas mi Biblia” probablemente no van a cumplir ese propósito.

Tal vez lo cumplirán por una semana o un mes o al final se cansaran, distraídos o perezosos.

Si vamos a hacer 2012 mejor que 2011, entonces necesitamos hacerlo mejor ahora! No solo debemos empezar bien sino también debemos terminar bien. Necesitamos terminar el próximo año mejor de lo que estamos terminando este año. Necesitamos más fervor para el reino del Señor este año.

¿Asumirás el reto de terminar el trabajo del Señor este año?

Hay unas pocas cosas más que deberían saber. Miren versículo 6 de Josué, capitula uno. Dios le dio un mandamiento a Josué y a los Israelitas (y a nosotros).

Él dijo, “Sé fuerte y valiente.”

En verso 7 y 9 Él dijo lo mismo.

No deberíamos ser débiles o cobardes, porque el Señor estará con nosotros. ¡Él no nos abandonará!

Es el deseo de Dios que nosotros derrotemos a nuestro enemigo, el diablo. Si estamos viviendo correctamente tendremos la seguridad de que podremos vencer al enemigo.

Dios le dio a Josué y a los Israelitas un difícil desafío, pero también El les dio lo que necesitaban para cumplir este desafío. Enfrentaremos algunas dificultades en el 2012 pero el Señor ira delante de nosotros.

Seremos exitosos.

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